¿Por qué podrías ganar menos en noviembre y diciembre en España? El ajuste del IRPF en tu nómina
Llegando a fin de año, muchos trabajadores en España se encuentran con una sorpresa desagradable: sus salarios en noviembre y diciembre pueden verse reducidos debido a un aumento en la retención del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Esta situación, aunque puede parecer inesperada, es una práctica común en la gestión fiscal de las empresas. Veamos por qué ocurre y qué significa para los empleados.
1. El IRPF: un impuesto progresivo y ajustable
El IRPF es un impuesto progresivo que se aplica sobre los ingresos anuales, y su porcentaje de retención en la nómina varía en función de la cantidad total que se espera que el trabajador gane durante el año. Sin embargo, a lo largo del ejercicio fiscal, pueden surgir factores que obliguen a las empresas a recalcular las retenciones, especialmente en los últimos meses del año.
2. Bonos y pagas extraordinarias: el factor de ajuste
Uno de los principales motivos por los que el IRPF aumenta en los últimos meses es la percepción de bonificaciones, pagas extras o cualquier ingreso adicional no previsto. Estos pagos incrementan la base imponible anual y, para ajustar la retención total al porcentaje adecuado, las empresas aumentan el IRPF en las nóminas de noviembre y diciembre.
Por ejemplo:
- Si un trabajador recibe un bono de fin de año, el sistema ajusta la retención para que coincida con la tributación correcta sobre el total acumulado anual.
3. Revisión y corrección de retenciones subestimadas
A lo largo del año, algunas empresas aplican un IRPF mínimo para no perjudicar los ingresos mensuales del trabajador. Sin embargo, al llegar noviembre y diciembre, revisan si las retenciones realizadas han sido suficientes. Si no es así, aplican una mayor retención para evitar que el trabajador deba abonar una cantidad considerable en la declaración anual de la renta.
Este mecanismo asegura que:
- El empleado no se vea sorprendido por un pago elevado al hacer la declaración de la renta.
- Se cumpla con la obligación de pagar el porcentaje correcto del IRPF durante el año.
4. ¿Cómo se calcula este ajuste?
La Agencia Tributaria establece que el IRPF se debe calcular sobre el total previsto de ingresos anuales. Factores que influyen:
- Incremento salarial durante el año.
- Cambios en la situación familiar (como nacimientos o cambios en la deducción por hijos).
- Pagas extras o ingresos adicionales que incrementen la base imponible.
Las empresas recalculan la proyección de ingresos y ajustan el tipo de retención para que coincida con el porcentaje legal que corresponde a la cantidad total.
5. ¿Qué puedes hacer para evitar sorpresas?
- Solicitar un ajuste anticipado: Puedes pedir que tu empresa aplique un tipo de IRPF más alto desde el inicio del año para evitar grandes ajustes al final.
- Revisar tus nóminas periódicamente: Es útil comprobar cómo se aplica la retención y anticipar posibles ajustes.
- Consultar con asesores fiscales: Un profesional puede orientarte para prever estos cambios y optimizar la carga fiscal.
El IRPF y la planificación fiscal personal
Aunque ver una reducción en tus ingresos a finales de año puede ser frustrante, este ajuste busca evitar cargas fiscales mayores en la declaración de la renta. Mantener un control sobre las retenciones y conocer cómo funciona el IRPF es clave para una mejor planificación financiera.
En Grupo Gesta, ofrecemos asesoría fiscal personalizada para que empleados y empresas comprendan y optimicen su situación fiscal. Contáctanos y asegúrate de que tus finanzas estén siempre bajo control.









